Historia de mi infancia en Suiza

07.03.2011 23:22

Hola amigos, soy Isabel, alumna de 1º B de Pedagogía. Quiero contaros que nací en Berna (Suiza). Mi infancia fue muy agradable en esos años, mis padres se casaron en 1964 y tuvieron que emigrar para trabajar en Suiza. A mi padre le hicieron un contrato de tornero mecánico en un taller y a mi madre la contrataron en la fábrica de relojes Omega, haciendo las esferas de los relojes, donde éstos llevan los números de los días de la semana. Mis tres primeros años los pasé con una hermana de mi madre, a la que la llamaba “tata” y con mi hermana a la que le llevaba un año. Al no estar mi “tata” de forma legal en Suiza, es decir, con un contrato de trabajo desde España, la obligaron a marcharse de allí. Mis padres, a mi hermana y a mí nos tuvieron que meter en una guardería mientras ellos trabajaban. La guardería era muy grande, tenía muchísimos juguetes. Me acuerdo de jugar con uno cubos cuadrados con dibujos en los lados y con los que tenia que formar un dibujo. También me acuerdo que en las paredes había unas pizarras para poder escribir con unos lápices de colores. El idioma que se hablaba era el alemán, con el que me tuve que desenvolver de oídas el ser tan pequeña. Recuerdo que mi madre me llevó de interprete para comprarme unos zapatos que a ella le gustaba para mi y yo decía que a mi me gustaban otros. Luego estuvimos en Bruj y tambien en Nauchatel que a mi padre lo mandaron a trabajar como tornero. Por ultimo nos venimos a Bernna y estuve en un colegio, donde iba en autobús, que por cierto el transporte era gratuito. Los alumnos llevábamos colgados en el cuello, como si fuera un collar con una cartulina del mes en curso, tachándonos los días que cogíamos el autobús, y así sucesivamente hasta finalizar el año. La clase era amplia, con dos ventanas a la izquierda y en el centro una mesa cuadrada donde se sentaba la maestra. En clase habría unos veinte alumnos de varios países, españoles, italianos, chilenos y claro suizos .En clase la maestra daba la clase en francés, luego lo decía en español, alemán e italiano si lo sabia. Me acuerdo que los lunes era un día muy completo, después de clase por la mañana, me iba a comer, y por la tarde me iba a nadar. Los martes por la tarde teníamos gimnasia en un gimnasio inmenso que tenia todo tipo de aparatos, hasta aros en el techo. Los miércoles teníamos clase de español, los jueves no me acuerdo. Los viernes nos enseñaban a coser a todos, tanto a niños como a niñas, y hacernos guantes de punto con cuatro agujas.
El material que nos facilitaba el colegio era gratuito, las libretas, lápices, gomas, sacapuntas, lápices de colores, los libros que nos hacia falta, etc. Bueno todo lo necesario para la clase. Cuando se nos acababa el material nos daban otro. A eso de media mañana nos daban un cartón pequeño de leche. En el patio de recreo, que por cierto que era grandísimo jugábamos todos los niños juntos.
 

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